8 de septiembre de 2010

Resquiet In Peace

¿Sabes? es inevitable no pensar en ti. Tal vez porque eres la única persona que conozco que ha pasado a un plano de conciencia distinto, la única persona que conozco -que me agradaba -y que ya no está aquí. Sabrás bien que no estoy "así" -no sé exactamente cómo -por ella, ya que, sinceramente, no la conocí y no me importaba mucho... -aunque suene mal -hablo por las personas que dejó atrás. Si vieras sus ojos... Es lo mismo que pasó contigo. Yo fui ese día por ti, es cierto, porque me agradabas y en los últimos meses habíamos hablado más, pero principalmente fui por ellas. Para darles el apoyo que sabía que necesitarían. Fue horrible, sin ánimo de ofender. Ver sus rostros, sus lágrimas rodar... las palabras que dijo y tu rostro de una palidez mortal atrapado en el féretro se han quedado grabadas en mi mente. No puedo borrarlas.
De cierta manera te lo agradezco. Suena cruel, lo sé, pero no lo digo en ése sentido. Creo que me comprendes. Si no hubiera vivido lo que viví debido a tu partida, tal vez nunca habría entendido lo que es dejar atrás a personas que amas, lo que es dejarlas viéndote partir, dejarlas sufriendo... Gracias a eso comprendí que era mucho mejor aguantar hasta el final que causarles algún tipo de dolor. Te escribí un poema, ¿recuerdas? Quiero volvértelo a "declamar" no sé por qué. Tal vez porque en ti encuentro algún tipo de consuelo.


R.I.P, para Laura...

Oh luna, dime porqué
¿por qué nunca lo vi antes?
Este ser, que antes fue humano, ahora es un ángel.

Dulce muerte... ¿por qué?
¿Por qué te la llevaste?
Nuestras miradas se distanciaron
pero no nuestros corazones
ahora bien, no puedo cruzar las fronteras
de la muerte y la vida
para encontrarla.

Aquellas palabras que me dijiste, aquellos gestos
y aquella sonrisa quedarán
grabada en mí, mientras mi voluntad sea firme
y decida recordarte.
¿Y si decido olvidarte en lugar de recordarte?

Aquellas palabras que me dijiste, aquellos gestos
y aquella sonrisa serán solo un vistazo
de un momento pasado,
aquellas cosas serán ahora
un recuerdo vacío,
o tal vez,
ni siquiera un recuerdo,
aquellas cosas no habrán existido jamás.

Palabras hirientes
que en un pasado me lastimaron
son ahora un anhelo.
Dime rara,
dime loca, dime extraña,
pero dime algo,
¿sabes qué?, simplemente
no digas nada ya...
descansa en paz, ser humano
transformado en ángel.

Espero te haya gustado. Aunque no sé si debería. Siento que estoy actuando como una boba, diciéndote todas éstas cosas, pero tal vez lo hago porque necesito sentir que no soy tan insensible, necesito sentir un poco de dolor o, si acaso, melancolía para poder saber que mi corazón no es de piedra. Ellas decían que les hacía sentir mal lo que Sor Aida, con lágrimas en los ojos y la voz desquebrajada, nos anunciaba. Pero lo cierto es que yo no lo sentía ¿Es eso normal?
Me esfuerzo en pensar que lo es. Que al ser una persona tan alejada de mi mundo, no me causó mucho impacto la noticia. Pero si hubieras visto. Había niñas llorando. Sentían la tristeza en el aire y se contagiaban de ella. Pero en mi interior me preguntaba el porqué. No lo comprendía totalmente.
Es natural que la muerte de alguien cercano -no necesariamente querido, sólo de tu alrededor -cause un tipo de impresión en ti. Por eso te he escrito estas palabras, Laura. La impresión que me causó fue la de recordarte, la de recordar aquellos ojos que te lloraban en ésa lluviosa tarde. Espero que estés bien, donde quiera que te encuentres. Recuerda que hay personas aquí que te extrañan. Creo que nunca lo superarán totalmente... es una lástima. ¿Quieres saber algo? A veces también te extraño.

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