27 de enero de 2012

Literatura

Octubre 23, 2011

La Literatura es el arte que emplea como medio de expresión la palabra, con el fin de dar a conocer algún hecho histórico o suceso propio de la subjetividad del autor, embelleciendo el lenguaje. Cuando hablamos de Literatura Universal nos referimos a todas aquellas expresiones literarias que han tenido lugar en la historia de la humanidad y que han servido como referente social e histórico de una determinada población, sin importar la subjetividad del escrito, es decir, han servido de reflejo de los valores sociales de una determinada época sin importar si fuera o no intención del autor.

Todos hemos oído alguna vez hablar de “La Ilíada” y “La Odisea”, de “Romeo y Julieta”; y de “La Divina Comedia”, entre otras; pero ¿qué convierte a una simple novela, poema u obra de teatro en Literatura Universal? ¿Cuál es la importancia de dicha Literatura? Para muchas personas este tipo de cuestiones parecerían superfluas en la realidad, en un mundo donde las artes quedan relegadas a un hobby en comparación con la Economía y el desarrollo tecnológico, entonces ¿qué hace importante a la Literatura?

Imaginemos un mundo “real”. Los temas de conversación serían la bolsa de valores, la caída del dólar, los avances científicos, las políticas económicas y sociales instauradas por un nuevo presidente…, y no menosprecio dichos temas, por el contrario, pienso que debemos darles la importancia que merecen, todos sabemos que son realmente importantes porque inciden drásticamente en nuestras vidas, a lo que me refiero es a ¿qué sería del mundo sin el arte? En mi concepto, el panorama se pinta gris. La literatura a lo largo de la historia de la humanidad ha servido para enriquecer y embellecer ese panorama. Si no fuera importante ¿por qué durante la guerra civil española aparecieron multitud de pinturas y poemas en alusión al dolor y miedo experimentado, en lugar de multitud de acuerdos políticos? ¿No podría Picasso haber tomado las armas, en lugar de pintar “La Guernica”? Entonces, ¿es la Literatura importante?

Homero, el poeta ciego, con “La Ilíada” y “La Odisea” dejó a la humanidad un conocimiento histórico de la antigüedad grecolatina impresionante, que abarcó desde cosmología y religiosidad hasta conflictos entre ciudades y países. Y qué decir de “La Divina Comedia”, ¿hubiera logrado la Iglesia Cristiana adquirir tanto poder si Dante Alighieri no hubiera –queriendo satirizar las doctrinas –dejado una cartografía y visión tan detallada del Infierno, Purgatorio y Paraíso; y de los castigos propios para cada pecado? ¿Tendríamos las mujeres una concepción tan idealista de lo que es o debería ser el amor, si William Shakespeare no hubiera escrito “Romeo y Julieta”? Entonces, reitero, ¿es la Literatura importante? ¿Tiene alguna influencia en el mundo “real”? Por supuesto.

No podríamos hablar de Literatura Universal sin mencionar autores como Safo, Sófocles, Séneca, Santo Tomás y San Agustín, Luis Góngora, Molière, Tolstoi, Petrarca, Miguel de Cervantes, Goethe, Walter Scott, Víctor Hugo, Lord Byron, Franz Kafka, William Blake, Oscar Wilde, Rubén Darío, Poe, Homero, Shakespeare y Dante; y podemos decir que lo que convirtió las obras de todos estos autores, en Literatura Universal fue la influencia que éstas tuvieron en la vida de las personas. La Literatura Universal ha contribuido al conocimiento detallado de las costumbres, creencias y cultura en general de las diferentes comunidades y pueblos a lo largo de la historia; ha sido un consuelo y vía de escape para millones de poetas, escritores y personas –lectores –en los momentos de crisis y dolor; ha contribuido a crear o afirmar paradigmas o arquetipos mentales en la sociedad; y es, hoy en día, una excelente forma de aprendizaje. Por estas y otras razones, la Literatura Universal es importante en nuestras vidas, sin importar la época o el tiempo.

25 de enero de 2012

Reflexión «de la brevedad de la vida» (Séneca)

Agosto 18, 2010

Es muy común el pensamiento y sentimiento de la brevedad de la vida entre las personas. Cuando se es pequeño, se quiere ser grande; cuando se es grande, se quiere ser pequeño. Cuando se es anciano, se busca con desespero la juventud perdida. Por ese buscar lo que no se es, malgastamos el tiempo, no le damos el verdadero valor a cada etapa de la vida. Se nos hace efímera.

"No es que tengamos poco tiempo, sino que perdemos mucho (...) No recibimos una vida corta, sino que nosotros la acortamos." Si las personas supieran emplear bien su vida, ésta no les parecería tan corta. Sería larga y plena, llena de todo lo que la persona considera importante. Deseos, sueños, anhelos, metas... harían de ella algo mejor.

El deseo de trascender, de dejar huella y ser recordado, si no por el mundo, por las personas amadas, crea en el hombre el miedo a la vejez, a la posteridad y a la muerte. "Teméis todas las cosas como mortales, y todas las deseáis como inmortales."

El largo o corto de la vida consiste en el mucho o poco provecho que la persona haga de ella, no de los años que ésta comprenda.

21 de enero de 2012

Yo quiero un corazón de acero

"Una lección sin dolor no tiene sentido. Eso es porque no se puede ganar algo sin sacrificar algo a cambio. Sin embargo, una vez que hayas soportado el dolor y lo hayas superado, ganarás un corazón que es más fuerte que todo lo demás. Así es... un corazón de acero."


(El final de una de mis series anime favoritas: Full Metal Alchemist)

9 de enero de 2012

Sobre los sueños de la infancia

Estuve hablando con la que fue mi mejor amiga 7 años atrás. Fue divertido. Me contó sobre su vida, hablamos sobre música, comimos... y recordamos. Fue nostálgico. Pero me llamó la atención algo que dijo que yo decía cuando era pequeña. Ella dijo algo como: "desde chiquita sabías lo que querías. Decías que querías ser una científica para hacer grandes cosas y yo ni siquiera sabía qué quería ser cuando grande" Me causó curiosidad que ella me recordara algo que yo había olvidado, y que dijera que le parecía asombroso -y rarísimo- que alguien tan pequeño tuviera ideas como esas. ¿Qué le puedo hacer? Era rara desde chiquita...

Creo que las personas nunca deberían dejar de soñar, nunca deberían perderse a sí mismos ni a esas ilusiones infantiles -sin llegar a extremos, claro está-. No es que mi sueño haya cambiado, sólo se ha redirigido. Quiero hacer cosas grandes, no para mí, pero sí. Creo, creo que es cuestión de vocación -y de rareza-.

No pudimos evitar sonreír cuando ella dijo eso. De cierto modo, me alegra que algunas cosas no hayan cambiado en estos siete años... hay personas que se vuelven demasiado importantes... no importa cuántos años pasen... eso me hace sonreír.